República Dominicana

La República Dominicana está situada en la parte oriental de la isla de La Española, en el Caribe. Es conocida por sus playas, paisajes y cálida hospitalidad. Actualmente, las principales actividades económicas del país son el turismo y la agricultura.

La República Dominicana es muy vulnerable a los efectos del cambio climático. Varios factores contribuyen a esta vulnerabilidad:

Ubicación geográfica

La ubicación del país en el Caribe lo expone a fenómenos meteorológicos extremos, como huracanes, tormentas tropicales y lluvias torrenciales. Sus zonas costeras son especialmente vulnerables a las inundaciones y las mareas de tempestad.

Deforestación y degradación medioambiental

La deforestación desenfrenada y las prácticas insostenibles de uso de la tierra han debilitado la resistencia natural de los ecosistemas del país. Esto agrava los efectos del cambio climático, provocando la erosión del suelo, la pérdida de biodiversidad y problemas agrícolas.

Escasez de agua y sequías

El cambio climático puede alterar los regímenes de precipitaciones y agravar la escasez de agua en algunas regiones. Las sequías pueden afectar negativamente a la agricultura, los medios de subsistencia y el acceso al agua potable.

Vulnerabilidad económica

La economía de la República Dominicana depende en gran medida de la agricultura, el turismo y otros sectores sensibles al clima. Cualquier perturbación causada por el cambio climático puede tener importantes consecuencias económicas para el país y su población.

Aumento del nivel del mar y amenazas costeras

Dado que una parte importante de la población vive en zonas costeras, la subida del nivel del mar supone una grave amenaza para las comunidades, las infraestructuras y los ecosistemas. La erosión costera y la intrusión de agua salada pueden afectar a la agricultura, las fuentes de agua dulce y la biodiversidad costera.

Para hacer frente a su vulnerabilidad al cambio climático, la República Dominicana está aplicando estrategias de adaptación y mitigación. Esto incluye la promoción de la gestión sostenible de la tierra, los esfuerzos de reforestación, la mejora de la protección costera y la inversión en fuentes de energía renovables. Además, la cooperación y el apoyo internacionales son esenciales para ayudar al país a reforzar su resiliencia y mitigar los efectos del cambio climático en sus recursos naturales, su economía y sus comunidades.

Actualmente, el proyecto Comunidades Caribeñas Resilientes (CCR) se está ejecutando en la República Dominicana a través de:

• Centro Naturaleza (CEDAE): operando en el Noroeste del país en los municipios de Villa Los Almácigos, El Pino, y Loma de Cabrera en las provincias de Dajabón y Santiago Rodríguez, dirigiéndose hacia el sur hasta las estribaciones centrales de la Cordillera Central, cerca de la frontera con Haití.
• Enda Dominicana: trabajando en el Suroeste de la isla, en las provincias de Elías Piña y San Juan de la Maguana, específicamente en los Municipios de El Cercado, Vallejuelo, Hondo Valle y Juan Santiago en la vertiente norte de la Sierra de Neiba, directamente en la frontera con Haití.